La Catedral de Sal de Zipaquirá se consolida como referente internacional en turismo de eventos

Foto: @BruceGaravito

El emblemático templo subterráneo de Colombia amplía su reconocimiento mundial al convertirse en escenario de bodas, conciertos, conferencias y actividades empresariales.

La Primera Maravilla de Colombia, fortalece su proyección internacional como un espacio versátil para la realización de eventos culturales, religiosos, empresariales y sociales. A 180 metros bajo tierra.

Un reconocimiento mundial

En los últimos años, la Catedral ha sido escenario de eventos de gran impacto, entre ellos conciertos de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, presentaciones de artistas nacionales como Andrés Cepeda, así como competencias deportivas y actividades impulsadas por marcas internacionales. Su infraestructura adaptada y la singularidad de su arquitectura subterránea han permitido que Zipaquirá sea vista en el mapa global como un destino único para el turismo de eventos.

Los escenarios del Parque de la Sal han sido adecuados para acoger una amplia diversidad de actividades: desde bodas y celebraciones familiares hasta congresos, activaciones de marca y ceremonias institucionales. Cada montaje se desarrolla bajo estándares de seguridad y calidad, garantizando experiencias memorables en un entorno donde confluyen arte, historia y naturaleza.

Ubicada a solo 29 kilómetros de Bogotá, la Catedral de Sal no solo atrae a turistas de todo el mundo por su carácter religioso y patrimonial, sino que se consolida como un espacio estratégico para dinamizar la economía local a través del turismo de eventos.

“Nuestra Catedral de Sal cuenta con escenarios únicos que han acogido marcas internacionales y producciones culturales de gran escala. Esto nos permite proyectar la Primera Maravilla de Colombia como un referente mundial para el desarrollo de eventos”, señaló Yenny Páez, gerente de la Catedral de Sal.

Un legado que evoluciona

Más allá de su relevancia espiritual y turística, la Catedral de Sal avanza en la diversificación de su oferta, posicionándose como un lugar donde el patrimonio cultural se convierte en escenario para nuevas experiencias colectivas y memorables.